domingo, 7 de julio de 2013

Insensibilidad

Buenas noches, sean bienvenidos al Laboratorio de la Insensibilidad donde experimentamos a diario con animales, torturados hasta morir, solo para que puedan ustedes disfrutar de un champú de calidad, de cosméticos no tóxicos.
Pero he de darles mi más sentido pésame, pues nuestros productos no os mataran pero lo que ocultamos contaminara sus almas. Ustedes saben mejor que nadie lo que se oculta tras las grandes marcas de productos de higiene.

En el nombre de la ciencia, del avance, de la investigación abrimos gatos vivos. Sufriendo la agonía de una muerte lenta y dolorosa. Envenenamos ratas, vivisección de primates y canes para comprobar el efecto de distintas drogas que os curaran el mareo tras conducir varias horas. 

(Vivisección. Significado: Dicese de la acción de una disección en vivo con fines científicos y de investigación. Si amigos, han leído bien. Abrimos animales en canal siendo totalmente conscientes, sin anestesia, solo atados, para su comodidad. Todo esto nos sentaría mal, pero es en nombre de al ciencia, el progreso y el futuro)

¿Usted empezó a fumar y quiere dejarlo? No se preocupe, nosotros, en nuestro laboratorio experimentamos con primates, les hacemos fumar hasta oxidar sus pulmones, les inyectamos nicotina en el globo ocular hasta enloquecer del mismo síndrome de abstinencia, golpeando sus rostros contra las barras de sus jaulas hasta morir. Usted no se preocupe, masacramos miles de animales, destruimos los pulmones de varios primates para salvar los suyos con nuestros parches de nicotina. Salvamos sus pulmones, ¿pero quien salvara su alma?

Es una molestia cuando el champú entra en sus ojos y escuecen provocando un picor ¿cierto? Para remediar este leve problema hacemos macabros experimentos con conejos, les inyectamos champú y químicos en los ojos, estomago e intestinos. De esta manera podemos ver la lenta y dolorosa muerte del pobre conejo y aprender algo de esto. Pero jamas aprenderemos que los animales sufren por nuestra sana comodidad.

Solo son animales por supuesto, no son como vuestras mascotas. El conejo que murió entre espasmos y escupiendo espuma por los químicos que le introducimos en el estomago y los ojos secos casi a punto de estallar por el mismo motivo no se llama Pelusita o Peluchito, solo es un número eso nos hace ser aun mas insensible hacia el maltrato del pobre animal.

Recuerden que detrás de cada producto higiénico que compre hay centenares de almas de animales muertos. Espero que esto no atormente su alma... si es que queda algo que atormentar.
¿Y es el ser humano el animal más racional? Desde luego si racional es sinónimo de cáncer de la naturaleza, de epidemia, de caos... entonces si, lo somos. Todos nosotros.

En El Laboratorio de la Insensibilidad torturamos animales a diario con macabros experimentos en nombre de la ciencia, el progreso y el futuro. Todo por un futuro innecesariamente mas cómodo.